Dos años de tu partida... ¡¡Te extraño Lucky!!

Este post no tiene nada que ver con los temas “mamá – bebé” pero quiero compartirles esta historia. 

Dicen que el perro es el mejor amigo del hombre no?... Lo es!
Sé que  para algunas personas este post les parecerá loco, ridículo o hasta perturbador, y todos los que piensen eso es porque aún no saben lo hermoso que es tener a una mascota a su lado y que ésta se convierta en tu mejor amigo, en un miembro más de tu familia, en tu fiel compañero.

Esta carta va para ti querido Lucky.

Hoy se cumple 2 años de tu partida hijito y de tan solo recordar que un día como hoy te fuiste, mi corazón se pone chiquitito  y no puedo evitar derramar unas lágrimas.

Recuerdo el día que llegaste a mi vida, siempre diré que llegaste en el momento preciso, en ese momento que necesitaba de un amigo, de alguien que me llene de alegría y momentos felices, en serio, tapaste ese vacío tan triste que sentía. Seguro por eso fuimos tan unidos, porque los dos nos hicimos muy felices. 

Muchísimas personas nunca entendieron el lazo tan fuerte que nos unía. Tú y yo éramos una pandilla de dos haciendo de las nuestras  y sacando canas verdes hasta a los vecinos.

Tu eras como esos perros de las películas que hacían trucos y cosas chistosas para llamar la atención:

-         - Aprendiste a comer con la cuchara.

-          -Los 6 años que estuviste a mi lado dormías en mi cama y no querías que nadie más se acueste a mi  lado.

-         - Peleabas con tu papá para tener un sitio en la cama.

-          -Te prestabas para todas las fotos, como si supieras que te están enfocando y tienes que sonreir.

-          -Aprendiste a obedecer y a no hacer pis ni puffy en la casa.

-          -Cuando estuve embarazada, nunca trataste de hacerle algo a mi panzota.

Feliz!

Así eran nuestras tardes.

 Sé que te hice el perro más feliz del mundo, a ver, que perro celebra su cumpleaños todos los años? Ninguno!!... Cada  fiesta que te hacía era una bomba canina, globos, serpentinas, torta, galletas, un fiestón el cual tu terminabas durmiendo y yo limpiando todo el desastre que había.

Obvio esa torta se iba a mi panza.

Con sus best friends

Cuando me enteré que estaba embarazada, empecé a hacer planes de como sería nuestra familia, papá, tú, Lucciano y yo… Como iban a ser nuestras salidas al parque, a la playa, nuestras noches, los juegos, las sesiones de fotos que tendríamos, íbamos a ser la familia perfecta. No sé cuantas noches imaginé tu reacción al ver por primera vez a Lucciano, aunque estoy segura que lo hubieras amado y protegido como lo hiciste conmigo.

Pero todo esos sueños y anhelos se desmoronaron… No! No me parece justo como pasó todo, no fue justo!... Tu enfermedad se manifestó de la noche a  la mañana y nadie se pudo dar cuenta, de pronto enfermaste y no podía permitir que sufrieras. En ese momento la panza de  7 meses que tenía no me podía impedir que te lleve a todos tus controles, análisis, biopsias y  tratamientos.

Luchamos juntos mi amor, LUCHASTE! Pero ya no tenías fuerzas, ibas cerrando tus ojos poco a poco y a mi se me partía el alma ver a ese nuevo Lucky, débil y enfermo, sin esas ganas de querer correr y salir a hacer travesuras. Lo único que le pedía  a Dios era que no permita que sufrieras y que te vayas tranquilo.

Aún recuerdo ese día como si fuera ayer, falté a clases y eso que era un curso importante, pero decidí no ir, te llevamos a hacerte unas ecografías y cuando regresamos a casa ya no querías bajar del carro, fue ahí donde me di cuenta que había llegado el día, te cargaron, te pusieron en el mueble y mientras yo te decía que no me dejes, fuiste cerrando poco a poco tus ojos y te convertiste en un angelito.

No sabes la falta que me haces Lucky, te extraño cada día y cada noche, contigo se fue un pedacito de mi corazón y siempre habrá un vacío en esta casa porque faltas tú. Contigo aprendí el significado de LUCHAR, tus ganas de vivir y tu valentía fueron admiración de muchas personas.

Gracias por amarme y darme tanta felicidad Lucky, más que un perro y una simple  mascota, fuiste mi compañero incondicional, el que siempre me sacó más de una carcajada y el que no se movía de la cama cuando yo estaba enferma. Fuiste una de las cosas más hermosas que me pasó en mi vida y te juro que nunca te olvidaré y que siempre estarás en mi corazón

Ps: Me hubiera encantado que conozcas  a Lucciano, es un niño inteligente, ama a los perros y .... Espera, sé que lo conoces, sé que estas aquí a nuestro lado cuidándonos :D

Te amamos

Papá, mamá y tu hermanito.

Ahora para todas las personas que me preguntan porque el cuarto de Lu está decorado con mil dálmatas, ya tienen su respuesta.